Sí. El año va a terminar. Y no puedo ir corriendo a mi casa a abrazar a mi mamá.
Belive
Faltando 5 pa las 12:  Veo fotos de años pasados y mi físico ha cambiado. Hasta unas “finas” arrugas me veo. Ya compré una crema para las primeras. Aunque me la pongo sin fe, porque con esta manera de reír no habrá quien pare este arruguero. Cosa que me hará muy feliz. Me gusta lo que veo en el espejo. Me gusta lo que me da de vuelta. Tengo más años pero yo hasta más bonita me veo. Ríete, no me importa. Lo que pasa es que me amo más.

Faltando 5 pa las 12:  Veo mi extracto bancario y ha cambiado mucho, muy por debajo de las expectativas de mi antigua yo. Aunque eso podría ser un problema. Nothing is for free en este mundo, aunque ya a estas alturas creo que todo se puede resolver con mi fórmula mágica: Desprendimientos + Ganas + Redes de apoyo (todos ustedes)= ¡Gánate la vida! Vivir estos meses en Nueva York me ha enseñado que siempre hay y habrá una manera digna de hacer dinero, aunque a veces tengas que remover mucho ego, que al final es nuestro oponente en este juego de la vida.

Faltando 5 pa las 12:  Veo mis amigos… (Suspiro grande). El recuento de los daños es que todo lo que pasó tenía que pasar para llevarme a otro nivel de consciencia. La gente sí me mentirá, sí tomará ventaja de mí, sí se irá sin dar una explicación. Aún me duele, aún hasta me extraño a mí estando con ellos, aún me sorprende no haber podido ver lo obvio. Pero cada uno de ellos dejó una grieta en mí y es así y ahí por donde entra la luz.

Lea también:

Los 13 episodios de Black Mirror ordenados del mejor al más impresionante

Faltando 5 pa las 12:  Veo mis amores… (Suspiro mas grande) ¡Desperté! Con todos los matices. Huyo de amores baratos, me aburrí de los amores imposibles o complicados, me cansé de justificar lo que no tiene justificación, intento no confundir amor con necesidad, me olvidé de las viejas fórmulas de romanceo. Quiero un amor mágico y real. Sencillo, auténtico y divertido. Leal y duradero (mientras dure). Una conexión de almas gemelas, kabalísticamente hablando (y es muy diferente a lo que hemos creído siempre).
Seguro me dirás que estoy soñando. Pero déjame, aún no me conformo con menos.

Faltando 5 pa las 12:  2016 fue mi año. Ojalá el tuyo también.

Faltando 5 pa las 12:  Te deseo un 2017 lleno de todo aquello que tu alma necesita para su evolución. Aunque no siempre es lo que queremos y aceptar eso también duele. Pero yo voy por más de eso mismo.

Un abrazo desde la fría Nueva York a todos los que pasan por aquí.

Feliz año desde ya. Aquí la canción que inspiró esta entrada. ¡Vamo a ambientarnos!

Lea también:

Un vistazo a la exposición de Spencer Tunick en Bogotá